Anodizado
La tecnología de Woorbel permite la fabricación de ruedas para corredera en base a aluminio extruido 6063T5. El aluminio, por sí mismo, es un material con un coeficiente corrosivo muy bajo. Los problemas de oxidación de las carcasas en condiciones de uso estándares son muy reducidas.
Aun así, en condiciones donde exista salinidad, humedad, grandes variaciones térmicas o la mezcla de las tres anteriores, en mayor o menor medida, será conveniente proteger exteriormente la rueda.
El tratamiento anódico es la protección anticorrosiva más eficiente, ya que se trata de un método de defensa que actúa desde la capa superficial del aluminio hacia su interior. En el caso de Woorbel, un mínimo de 15 micras. Además, un sellado posterior del proceso garantiza la longevidad del aluminio e impide su degradación.
Corrotect®
La oxidación constituye uno de los problemas más comunes en los metales, pero afortunadamente existen técnicas y métodos para solucionar dicho inconveniente. El recubrimiento Corrotect® es una de las soluciones más eficientes en este sentido, ya que, gracias a un fino recubrimiento de electrolítico, protege la laminación de los cojinetes y de las superficies de sellado de la oxidación.
Es necesario destacar que el recubrimiento Corrotect® también evita la aparición de corrosión en aquellas superficies mecanizadas en chaflanes y radios, así como su penetración en los sistemas de sellado. Este sistema protege el brillo del metal y aumenta significativamente su vida útil en comparación con las superficies no recubiertas. Por otro lado, la aplicación de la tecnología Corrotect® permite el intercambio entre aquellos rodamientos que comparten las mismas dimensiones.
El recubrimiento Corrotect® ha superado satisfactoriamente el ensayo de niebla salina, contando con la DIN EN ISO 9 227, ASTM B117. Dicha prueba certifica su eficacia contra la condensación, el agua de lluvia, el agua excesivamente alcalina o ácida y el agua que contiene altos niveles de sal.